Quiénes Somos
Historia
JPC URUGUAY es una organización cristiana, sin fines de lucro y de carácter autónomo conformada en 1972.
Desde nuestros inicios hemos trabajado activamente en la formalización de programas relacionados con las realidades de la niñez y la juventud en Uruguay.
En 1989 formalizamos nuestra relación con el Estado y conformamos la Asociación Civil Juventud para Cristo en Uruguay. Desde entonces hemos operado en forma cooperativa con organismos del Estado, con organismos internacionales, y con la gran diversidad de organizaciones no gubernamentales (ONG).
Como integrantes de la familia de Juventud para Cristo Internacional, adherimos a la visión y misión que es común a todas las organizaciones que, en todo el mundo, sirven bajo el mismo lema.
Misión:
Promover en los jóvenes – priorizando a los sectores más pobres – el acceso a una vida plena, a través del ejercicio de los valores cristianos de justicia, paz, solidaridad, tolerancia y amor, mediante acciones en el ámbito personal, familiar, comunitario y político-estructural.
La organización se rige por el Pacto de Lausanna.
Visión:
Nuestra visión se orienta en lograr que cada uno de los proyectos de los diversos programas institucionales promocionen un adecuado desarrollo bio-sico-social y espiritual del ser humano; fortalezcan la integración familiar, las redes locales y la participación; y se involucren en la construcción de políticas sociales y metodologías de intervención adecuadas.

Acción:
Nuestra acción está orientada hacia niños, niñas, adolescentes y jóvenes y sus familias, en tres niveles de intervención:
- Personal (procurando un desarrollo integral)
- Familiar y comunitario (favoreciendo el fortalecimiento familiar, el desarrollo de redes locales y la participación)
- Político y estructural (participando en la construcción de políticas sociales y metodologías de intervención adecuadas)
Principio éticos:
- Justicia, que busca recuperar la dignidad de quienes han sido excluidos de toda oportunidad de desarrollo integral.
- Paz, que interrumpe los ciclos de violencia y restablece un sano desarrollo de los vínculos personales y grupales.
- Solidaridad, que une y acerca realidades diferentes, que comparte soluciones, humaniza y recrea la realidad.
- Tolerancia, que mantiene viva la diversidad y la singularidad, permitiendo una convivencia pacífica y cotidiana.
- Amor, que permite trascender y promover los valores anteriores para todas las personas.

Código de conducta vigente:
Compartimos con ustedes nuestro Código de conducta aprobado el viernes 12 de junio de 2015 en nuestra Asamblea General de Socios. Léelo aquí.
Política de género:
Juventud para Cristo está comprometida, a través de la reflexión y la acción, con el reconocimiento efectivo del valor y dignidad dados por Dios a todo ser humano, del cual se deriva el reconocimiento de los derechos de todas las personas.